Segunda Mision D: ¡Atraparé a ese perro!

El día estaba iluminado y radiante muy raro en la villa por lo cual me dispuse a realizar mi segunda misión, corrí desde mi casa hasta el despacho del Mizukage para recibir mi próximo mandato, seguido de aquello fui al lugar en el cual tenia que encontrar a la persona que ayudaría, esta parecía un poco afligida y triste por lo cual sin dudarlo le prometí que encontraría a su perro antes de siquiera el medio día así que antes de nada le pregunté el color del animal y ante nada sus gustos, luego de aquello partí a buscarlo por la aldea.

-A ver! El señor le dijo a Juvia que era de color negro con blanco, no tan grande y que tiene una pañoleta!, Bien Juvia al rescate!-

Decía mientras corría por los alrededores haciendo sonar una maraca que el señor me había dado, me había dicho que ese sonido le encantaba por lo cual probablemente llegaría hasta mi con eso así que sin vacilar lo empecé a utilizar mientras cantaba la canción de la cucaracha, sabia que posiblemente no funcionaria y que me vería ridícula así que para eso estaba cubierta con una gabardina negra y un pañuelo que cubría la mayoría de mi rostro.

-La cucaracha!!! La cucaracha!-

Cantaba mas lamentablemente la niebla había empezado a bajar ¿En verdad cantaba tan feo? De cualquier manera prendí mi linterna para ver mejor pero para cuando me di cuenta a mí alrededor se encontraban más de diez perros que al parecer desde hace ya algunos minutos me habían estado siguiendo.

*Por Dios en verdad esto es atrayente para los perros de la villa!!!*

Busqué entre todos ellos mas no estaba el perro deseado por lo cual seguí con mi camino hasta percatarme de que alguien me seguía por lo cual a cada rato regresaba a ver hacia atrás, sentía que se escabullían de un lado a otro tras de mi así que al volver a tener esa sensación volteé bruscamente hacia atrás utilizando mi Water Nebulosa contra el “Enemigo” mas este escapó rápidamente para luego presentarse frente a mi, ¡Era el perro del Aldeano! En realidad no sabia que un animal adiestrado para ser ninja era tan impresionante!

-Eres el perro del Señor Tomoeda?-

Pregunté mientras me sacaba el pañuelo del rostro y bajaba mi capucha mostrándome algo sorprendida.

-Juvia te a estado buscando para que vuelvas a casa! El Señor Tomoeda pidió ayuda a Juvia por que esta preocupado por ti Perro-san-

Le dije acercándome mientras este se alejaba lentamente y caminaba hacia otra dirección, no parecía ser que me fuese a tacar por lo cual lo seguí para quedarme totalmente sorprendida en un pequeño lugar alejado de las casas había una perrita muy linda junto a otros cuatro cachorritos, la mascota ninja del señor Tomoeda era padre! Por lo cual lo acompañe y cuide de sus perritos luego de eso regresé a la casa del Señor con algunas fotos de su mascota explicándole lo sucedido.

-Y entonces señor Tomoeda? Juvia va por el perrito negro o no?-

Le pregunté con una sonrisa dándole las fotos.

-La perrita novia de su mascota no tiene dueño! –

Dije lanzando un poco de leña al fuego y haciéndome la desentendida.

-Juvia, tráeme a mi mascota, a su “Novia” y a los cachorritos, los cuidaré a todos y si quieres puedes venir ayudarme cuando quieras!-

Seguido de aquello hice lo que el Señor me dijo y con eso pude concluir mi misión de una manera que ni yo me lo esperaba.