Misión C |¡Haz los recados!|

por **Noctis Lucis Caelum** 29/03/12, 06:25 pm

Noctis partió desde Kirigakure hacia Konohagure, el viaje era largo, pero un señor le había pedido que trajera unas cartas perdidas de su hijo, que se encontraban enla aldea. Noctis tardó unos dias alternando entre barco y viajes a pie para llegar a Konohagure. Nada más llego a la aldea y sacó el mapa que le había hecho el señor de donde debía ir a recogerlas, en este estaba escrita la frase: " ¡Y recuerda! ¡El contenido de esas cartas es más valioso que tu mismisima vida!". - Maldito viejo, mira que ya me lo dijo veces antes de partir. - El joven se dirijió a objetos perdidos, adentrandose en las calles de la villa, la cual estaba superpoblada, apenas se podía andar por las calles sin tropezar con alguien. Al llegar allí, Noctis se puso en cola para ser atendido, el barullo era increible, en Kirigakure las calles no estaban tan llenas. Poco más tarde, llegó el turno de Noctis. - Vengo a recojer unas cartas perdidas ¿ Las tienen ustedes? - Preguntó Noctis. - Ahora mismo solo tenemos estas. - El señor que atendía a Noctis rebuscó entre un monton de trastos en unas cajas y sacó dos cartas. - ¿ Son estas ? - Este le acercó las cartas a Noctis y se las dió para que las viera mejor. - Si, son estas, muchas gracias. - Noctis saliò del edificio e hizo todo el camino de vuelta hasta la salida de konohagure. Una vez allí Noctis se paró en un puesto de takoyaki y comió algo, el viaje de vuelta tambien sería largo, asi que necesitaba estar al 100%. Noctis pagó y salió de la aldea, guardó las cartas y se adentró en el bosque que rodeaba a la aldea, de vuelta a kirigakure. Un rato más tarde, al salir a una enorme pradera, una hombre que venía en dirección contraria, le interrumpío en su camino. - Perdone, ¿Es uested el que está haciendo la tarea de recoger las cartas del señor Fuku? - Noctis asintió con la cabeza. - Bien, vengo encargado por el, me dijo que se podía ahorrar el camino de vuelta si me daba las cartas. - Noctis miraba fijamente al hombre´, cuando de repente Noctis lo ignoró y continuó su camino. - ¡Oiga! ¡Deme las cartas! - Dijo el hombre en un tono serio, Noctis se detuvo y giró para mirar al señor. - Me niego, tengo que volver a Kiri de todas formas, e igualmente me parece que iran más seguras conmigo. - El señor sacó un kunay. - Si no quieres hacerlo por las buenas, habrá que hacerlo por las malas niñato. - Noctis desenfundó su tanto y se puso en guardia, el hombre empezó a correr y trató de asestar un corte con el kunay que fue bloqueado habilmente por Noctis con su tanto, el cual con su pie derecho dió una patada al pie izquierdo de su rival para desequiliblarlo y tirarlo al suelo para, en acto seguido clavarle la tanto en este mismo pie, el hombre gritó de dolor, Noctis sacó la tanto del pie del hombre, secó la sangre y la guardó en su funda de nuevo, y sin demora continuó con su camino, dejando atras al herido. Despues de un buen rato de caminata Noctis llegó a otro bosque y se adentró en el. En el camino le sorprendieron unos dos bandidos que aparecieron en su camino, exigiendo todo lo que Noctis llevara encima, el cual sin ningun tipo de piedad inmovilizó sus pies gracias a su tecnica Kami Te Kimitsu y sacó varios kunays, los cuales lanzó a estos clavandoselos en la cabeza o cuello, mantandolos instantaneamente. - Siempre que salgo yo tiene que haber actividad criminal. - Dijo antes de proseguir su camino. Al salir del bosque, acabó en otra explanada, y por el camino se veía una tienda, en la cual Noctis paró para descansar un rato. Cuando salió de la tienda revisó el llevar la carta, que para sorpresa de este desapareció, Noctis abrió la puerta del restaurante y se acercó al camarero para preguntarle si el las había visto, dijo que no. Noctis se giró y vio que detras de donde el se sentó durante el descanso había una mesa con cuatro personas comiendo, Noctis se acercó y amablemente preguntó por la carta, los cuatros dijeron que no a la vez, sincronizados. A Noctis le extrañó eso, por lo que se quedó unos segundos observando a estos sin moverse. Noctis acabó por darse la vuelta y en cuanto lo hizo, sintió que algo se le clavaba en la mano derecha, se giró para ver que uno e los que estaba comiendo se había levantado y clavado un Kunay a Noctis, ante esto, Noctis agarró con su otra mano al hombre y lo lanzó contra la pared, los otros tres se levantaron y sacaron katanas. Noctis sacó el kunay de su mano y con la otra cojió su tanto, los tres atacaron a Noctis a la vez, pero este se deshizo con un kami shigure y se formó a espaldas de estos, realizando los sellos para usar el Kazekiri, lanzó un corte al aire con su mano izquierda y creó una onda de viento cortante la cual hirió gravemente a los tres rivales de este. Noctis se acercó al que le clavo el kunay y se lo clavó a el en el estomago, buscó en los bolsillos de este y sacó las cartas, les miró por encima del hombro y se fué rápidamente. Horas más tarde, Noctis llegó a Kirigakure de nuevo, entregó las cartas y se fué a su casa.